martes, 26 de octubre de 2021

 

HABLANDO CON LOS APUS

En el  2000 salió la primera edición de mi libro ‘Hablando con lo Apus’ y la última unos años más tarde. Tuve algunos reparos en publicar mis sesiones con 'los papitos y las mamitas’ como les llaman en el Qosqo a estas entidades de energía del mundo andino. Antes, ni yo hubiera creído que los cerros y la madre tierra hablaran con nosotros, los seres humanos. Me dijeron que curaban y no les di crédito. Hasta que  las circunstancias  determinaron mi encuentro con ellas. No fui por una curación pero un día respondí a una invitación y no conocía nadie. Después me enteré que no daban entrevistas y cuando murió su maestro de convocación las sesiones se acabaron. No pienso publicar otra edición de ‘Hablando con los Apus’ sin embargo me han reclamado tanto por el libro que algo haré. Estoy terminando un ensayo sobre la procesión del Corpus Christi y los diálogos con ellos reaparecerán en una segunda parte. Pienso que será a mediados del próximo año.

Ojalá sea posible. La financiación es un desafío en estos tiempos de pandemia.  

En seguida una nota de introducción a uno de los apus, Soqllakasa de Saywite que protege los campos de anís, entresacada del libro. Llegué el día de su cumpleaños. Le hicieron una fiesta y me regaló un cuye delicadamente horneado. Lo sentí bailar con la pachamama de Calca Lares. Ambos lo disfrutaron:  

A veces soy muy indecisa para viajar, pero me llama Regina, que tiene urgencia de consultar con los Apus y las Pachamamas, y sin pensarlo dos veces estoy en el avión, con destino al Qosqo. En la víspera llamé a Amésquita por teléfono para avisarle de nuestra ida.

--Viene usted a buena hora –me contestó--. Mañana es el cumpleaños del señor Soqllakasa.

--Qué cosa, ¿los ángeles cumplen años?

--Sí, como nosotros y habrá una gran fiesta. Procure llegar antes de las doce del día.

--Estaremos a las siete de la mañana –le dije al despedirme.

Esa fue la intención, pero una densa neblina no permitió que nuestro avión, el primero de ese día, pudiera despegar a hasta las diez de la mañana. Amésquita había ido dos veces al hostal “El Peregrino”, donde nos alojaríamos. Me encontró cuando bajaba del auto que nos condujo del aeropuerto.

--¡Vámonos, ya casi no hay tiempo! --urgió.

--Pero, recién estoy llegando…

--No hay tiempo, vamos.

Pregunté a Regina si quería ir. Había viajado con cierta aprensión sobre los efectos de la altura y prefirió quedarse porque al comienzo suele sufrir el soroche. Le dejé mi maletín y me fui.

Llegamos cuando estaba por terminar el último turno. Había unas quince personas que entraron, cerrándose luego la puerta…..

Alfonsina Barrionuevo

4 comentarios:

  1. Buenas tardes, dónde puedo adquirir el libro, porque en la librería Virrey está agotado.

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    1. Srta. Yoysi: En el segundo semestre del año estará saliendo HABLANDO CON LOS APUS, gracias!

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  2. Hola!, donde se puede adquirir el libro??

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  3. Buenas noche, aun se puede adquirir el libro?

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